2010 puede ser el año más fatídico en la historia de la casa japonesa Toyota. Su piloto de pruebas jefe, Harumi Naruse, de 67 años, ha perecido en el circuíto alemán de Nürburgring en un terrible choque frontal acaecido en una de las carreteras de servicio adyacentes al circuito, mientras conducía un flamante Lexus LFA en pruebas. Al parecer colisionó con un BMW que también estaba siendo objeto de pruebas, muriendo en el acto. Los dos ocupantes del BMW se encuentran hospitalizados en estado grave. Todos los implicados llevaban cascos reglamentarios y cumplían con otras medidas de seguridad, lo que ilustra la violencia del choque. Aquí os dejo un enlace a la noticia original, con video incluído.
Estas escalofriantes noticia se suman al mal momento cara a las relaciones públicas y con los cliente por el caso de las muertes en accidentes causados por problemas con el pedal acelerador: un problema grave que ya ha llevado a Toyota a pasar bochorno frente a los legisladores estadounidenses.
Harumi Naruse era miembro de Toyota Motor Corporation desde 1963 y recientemente dirigió el equipo de carreras Gazoo que inscribió el Lexus LFA en la carrera de 24 horas de Nürburgring. Se le conocía como el "padrino" del LFA y su reputación en Toyota era legendaria. Se decía de él que había pasado más tiempo en Nürburgring que cualquier otro piloto japonés.
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